Evita castigar por adelantado a tu hijo con TDAH: Potencia su tranquilidad
¿Amenazas con castigos a tu hijo con TDAH antes de que ocurra un mal comportamiento? Esto puede aumentar su ansiedad en lugar de ayudarlo. Descubre por qué esta estrategia no funciona y qué hacer en su lugar para fortalecer su tranquilidad y confianza.
Universo TDAH y TEA
3/3/20251 min leer


Evita castigar por adelantado a tu hijo con TDAH: Potencia su tranquilidad
Si eres padre o madre de un niño con TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad), es posible que, para prevenir situaciones difíciles, hayas caído en la trampa de advertir castigos antes de que sucedan. "Si gritas, te castigaré", "Si no te sientas, perderás tu juguete favorito". Sin embargo, esta práctica puede ser más perjudicial de lo que imaginas.
¿Por qué anticipar castigos no funciona?
Los niños con TDAH suelen tener dificultades con la impulsividad, la regulación emocional y la memoria de trabajo. Cuando les anticipas castigos antes de un evento, como ir a la escuela o una reunión familiar, lo único que logras es aumentar su ansiedad y estrés. En lugar de prevenir un mal comportamiento, podrías estar provocando una crisis innecesaria.
¿Qué hacer en lugar de amenazar con castigos?
En lugar de enfocarte en lo que podría salir mal, opta por reforzar su confianza y ayudarlo a manejar sus emociones de manera positiva. Algunas estrategias incluyen:
Usa afirmaciones motivacionales: En vez de decir "Si gritas, te castigo", prueba con "Tú puedes hablar con calma, confío en ti".
Refuerza el buen comportamiento: Destaca sus logros en lugar de sus errores. Un simple "Me encanta cómo estás sentado y atento" puede hacer una gran diferencia.
Ayúdalo a anticipar situaciones: Explícale qué sucederá y dale herramientas para afrontar cada momento sin sentirse abrumado.
Practica la paciencia y la comprensión: Recuerda que su cerebro funciona de manera diferente y necesita un entorno de apoyo en lugar de presión constante.
Conclusión
Educar a un niño con TDAH requiere paciencia y estrategias adecuadas. Evitar castigos anticipados y enfocarse en la motivación y la tranquilidad puede mejorar su comportamiento y bienestar emocional. La clave está en ser su guía y apoyo en lugar de una fuente adicional de estrés.